
Visión global de startups e inversiones de capital de riesgo al 4 de noviembre de 2025: las mayores transacciones de IA, el regreso de las OPI, el crecimiento de los fondos de riesgo y la formación de nuevos hubs tecnológicos.
Al inicio de noviembre de 2025, el mercado global de capital de riesgo sigue recuperándose con confianza tras un prolongado período de declive. Los inversores de todo el mundo vuelven a financiar activamente startups tecnológicas: se cierran acuerdos récord y los planes de OPI vuelven a ser el centro de atención. Los principales actores regresan con inversiones a gran escala, los gobiernos refuerzan el apoyo a la innovación y el capital privado vuelve a fluir hacia el ecosistema de startups.
El incremento de la actividad de capital de riesgo se observa en todas las regiones. América del Norte sigue liderando (especialmente en el campo de la inteligencia artificial, que recibe la mayor parte de las inversiones), pero otras partes del mundo también están ganando impulso. En Oriente Medio, se ha registrado un notable aumento de las inversiones, y se están formando hubs tecnológicos apoyados por fondos soberanos. En Europa, el mercado muestra estabilidad: Alemania supera por primera vez al Reino Unido en número de transacciones, y las etapas iniciales de financiamiento son especialmente fuertes allí. En Asia, la situación es mixta: China muestra signos de recuperación tras un período flojo, aunque su actividad aún no alcanza los niveles pico de 2021 a 2022; al mismo tiempo, India y el Sudeste Asiático atraen capital significativo en medio de una relativa desaceleración en China. Los ecosistemas de startups en Rusia y los países vecinos de la CEI también se esfuerzan por no quedar atrás, a pesar de las limitaciones externas. Se está formando un nuevo ciclo de incremento de capital de riesgo a nivel global, aunque los inversores siguen actuando de manera selectiva y cautelosa.
A continuación se presentan los eventos y tendencias clave que están definiendo la agenda del mercado de capital de riesgo al 4 de noviembre de 2025:
- Flujo de capital y retorno de megas transacciones. Los principales fondos de capital de riesgo están recaudando cantidades récord, los mayores inversores vuelven a realizar inversiones activas, inundando el mercado con capital y avivando el apetito por el riesgo.
- Dominio de las inversiones en IA y nuevos "unicornios". Rondas de financiamiento extraordinariamente grandes han elevado las valoraciones de las startups a nuevas alturas, especialmente en el segmento de inteligencia artificial, dando lugar a una nueva ola de "unicornios".
- El regreso del mercado de OPI. Las salidas exitosas de empresas tecnológicas a bolsa confirman que se ha abierto nuevamente la tan esperada "ventana" para salidas y que los inversores pueden esperar liquidez.
- Expansión del enfoque sectorial. El capital de riesgo no solo se dirige a la IA, sino también a fintech, proyectos climáticos y "verdes", biotecnología, desarrollos de defensa e incluso renacientes startups de criptomonedas.
- Consolidación a través de transacciones de M&A. Una nueva ola de fusiones, adquisiciones e inversiones estratégicas está reconfigurando el paisaje de la industria, creando oportunidades para salidas y un crecimiento acelerado de los jugadores más sólidos.
- Hubs globales y crecimiento regional. Oriente Medio, el Sudeste Asiático, América Latina y otras regiones están fortaleciendo sus posiciones en el mapa de capital de riesgo mundial, atrayendo capital récord en medio de la desaceleración en China.
- Rusia y la CEI: iniciativas locales. A pesar de las limitaciones, en la región se están lanzando nuevos fondos y programas de apoyo a las startups, destinados a estimular el desarrollo de ecosistemas locales y atraer la atención de los inversores.
El regreso de los megafondos: grandes inversiones nuevamente en el mercado
Los mayores jugadores de inversión están regresando triunfalmente a la arena del capital de riesgo, lo que indica un nuevo aumento del apetito por el riesgo. El japonés SoftBank, por ejemplo, está formando un nuevo fondo Vision Fund III de aproximadamente $40 mil millones, enfocado en tecnologías avanzadas (principalmente en IA y robótica). Los fondos soberanos de los países del Golfo Pérsico también se han activado: están invirtiendo miles de millones de dólares en proyectos tecnológicos y desatando megaprogramas estatales para apoyar al sector de startups, creando en Oriente Medio sus propias "valles de silicona". Al mismo tiempo, están surgiendo en todo el mundo numerosos nuevos fondos de capital de riesgo que atraen capital institucional significativo para inversiones en sectores de alta tecnología.
Las prestigiosas firmas de capital de riesgo de Silicon Valley también están aumentando su presencia. Los fondos estadounidenses han acumulado reservas sin precedentes de capital no invertido (el llamado "pólvora seca"): cientos de miles de millones de dólares listos para ser invertidos en nuevos proyectos. Todo esto conduce a un flujo de liquidez hacia el mercado de startups y forma las condiciones para la aparición de megas transacciones. Las rondas de financiamiento de varios millones e incluso miles de millones se están convirtiendo nuevamente en un fenómeno regular, aumentando significativamente las valoraciones de empresas prometedoras y intensificando la competencia entre inversores por entrar en los mejores proyectos.
Inversiones récord en IA: nueva ola de "unicornios"
El sector de la inteligencia artificial está actuando como el principal motor del actual auge del capital de riesgo, mostrando volúmenes de financiamiento sin precedentes. Los inversores financian gustosamente a las startups de IA con sumas colosales, elevando sus valoraciones a alturas nunca vistas. Solo en el último trimestre, varias empresas que trabajan en inteligencia artificial generativa y modelos base han atraído rondas de financiamiento de miles de millones de dólares: entre ellas, la californiana Anthropic (~$13 mil millones), el proyecto xAI de Elon Musk (~$5.3 mil millones), la francesa Mistral AI ($2 mil millones) y varias otras. Como resultado, casi la mitad de todas las inversiones de riesgo ahora se dirigen al sector de IA, y un pequeño grupo de empresas de IA absorbe la mayor parte de todo el capital recaudado.
Al atraer capital en tales escalas, las startups del sector de inteligencia artificial están rápidamente ingresando al club de los "unicornios" con valoraciones superiores a $1 mil millones. La lista global de empresas privadas unicornios ha crecido en cuestión de meses, aumentando significativamente su valor total. Las grandes corporaciones tecnológicas tampoco se están quedando atrás e invierten en infraestructura para IA: un ejemplo destacado fue la transacción de Microsoft, que invirtió $9.7 mil millones en la startup australiana IREN, que se ocupa de capacidades de computación en la nube para tareas de IA. Esta carrera armamentista en el ámbito de la IA está atrayendo a nuevos inversores que buscan no perderse el próximo avance, y alimenta la percepción de que estamos presenciando un aumento histórico del interés por la inteligencia artificial.
El mercado de OPI cobra vida: ventana de oportunidades para salidas
El mercado mundial de ofertas públicas iniciales (OPI) está saliendo de su letargo y está volviendo a ganar impulso. Tras varios años de tener prácticamente "cerrada" la "ventana" para salidas, los inversores de capital de riesgo finalmente tienen la oportunidad de realizar beneficios: una ola de importantes OPI tecnológicas señala el regreso de la confianza en los mercados públicos. En los últimos meses, varios "unicornios" han debutado exitosamente en bolsa con valoraciones superiores a $1 mil millones. Uno de los más esperados fue la salida a la Bolsa de Nueva York del gigante fintech sueco Klarna, con una capitalización de aproximadamente $15 mil millones, significativamente por encima de su última valoración privada en 2022 (de aproximadamente $6.7 mil millones), aunque todavía por debajo de su valoración máxima en 2021.
En EE.UU., un evento destacado fue la OPI del desarrollador de software Figma, que llamó la atención de los inversores tras la cancelación de su venta. También la empresa estadounidense de ciberseguridad Netskope tuvo un exitoso listado, al igual que varias empresas asiáticas (incluyendo al fabricante de automóviles Chery Automobile en Hong Kong). En total, en el tercer trimestre se emitieron más de una docena de empresas de riesgo en los mercados mundiales con valoraciones de unicornio, y la tendencia continuó durante este otoño. Las empresas están apurándose por aprovechar el momento favorable: un mercado bursátil en alza y una demanda sostenida por emisores tecnológicos están creando una "ventana de oportunidades" para nuevas OPI. Si las condiciones macroeconómicas se mantienen estables, los expertos esperan un mayor aumento en el número de salidas a bolsa a finales de 2025 y en 2026.
Diversificación de las inversiones: no solo IA
En 2025, las inversiones de capital de riesgo abarcan un círculo cada vez más amplio de sectores y ya no se limitan solo a la inteligencia artificial. Tras el descenso del año pasado, está resurgiendo el interés por los proyectos fintech: startups en el ámbito de las finanzas digitales, servicios bancarios y pagos están recibiendo inversiones significativas. Por ejemplo, en EE.UU., la plataforma de pagos SavvyMoney captó $225 millones, y en Europa están creciendo activamente los neobancos y servicios de "compra ahora, paga después". También se observa un fuerte impulso en tecnologías climáticas y ecológicas: startups "verdes" en el ámbito de energías renovables, gestión de residuos y reducción de emisiones están atrayendo rondas significativas, en medio de un enfoque global en ESG y desarrollo sostenible.
También está regresando el apetito por las biotecnologías. Las startups en el ámbito de tecnologías médicas y farmacéuticas (desde nuevos métodos de tratamiento hasta investigaciones genéticas) están volviendo a interesar a los inversores, lo cual es evidente en el crecimiento del financiamiento del sector: en el último trimestre, el sector salud y biotecnología atrajo casi $16 mil millones en todo el mundo. En la ola de cambios geopolíticos, hay un notable interés en desarrollos de defensa y aeroespaciales: los fondos están apoyando a empresas que crean drones, satélites, sistemas de ciberseguridad y otros productos de "uso dual". Incluso la industria de criptomonedas, que ha experimentado una caída, está recuperando impulso: algunas startups de criptomonedas y plataformas de blockchain vuelven a captar capital a medida que el mercado de activos digitales se estabiliza. Así, el capital de riesgo se está distribuyendo de manera mucho más amplia, abarcando diversos sectores de la economía.
Consolidación y M&A: aumento de la escala de los jugadores
Las valoraciones exageradas de las startups y la dura competencia por los mercados están empujando a la industria hacia la consolidación. Las grandes transacciones de fusiones y adquisiciones están nuevamente en el centro de atención, aumentando a los jugadores clave y reconfigurando el paisaje del sector tecnológico. Tras un relativo letargo en años anteriores, los gigantes corporativos y los "unicornios" con sólidos recursos están activando adquisiciones de proyectos prometedores para fortalecer posiciones y acceder a nuevas tecnologías.
En el tercer trimestre de 2025, el volumen de transacciones de M&A en el ámbito de empresas de riesgo alcanzó uno de los niveles más altos de los últimos años. Nueve startups fueron adquiridas por más de $1 mil millones cada una. Entre los ejemplos más notables se encuentra la compra por parte de OpenAI de la startup de IA californiana Statsig para fortalecer sus desarrollos, y la adquisición por parte de Workday de la plataforma alemana de inteligencia artificial Sana Labs. En Europa, se registraron varias "salidas" a través de la venta: se realizaron importantes transacciones de M&A en el ámbito de fintech, ciberseguridad y tecnologías médicas (por ejemplo, la empresa de IA israelí Noma Security atrajo a un inversor estratégico, y la sueca Sana fue adquirida en una transacción internacional). Además, en la industria de criptomonedas, la bolsa estadounidense Coinbase está negociando la compra de la startup fintech londinense BVNK por aproximadamente $2 mil millones, un movimiento destinado a consolidar el mercado de stablecoins. Esta ola de fusiones proporciona a los inversores la liquidez tan necesaria y permite a los jugadores más exitosos aumentar su escala de negocio, aunque el número total de startups independientes sigue disminuyendo.
Crecimiento regional: nuevos hubs de capital de riesgo
La actividad de capital de riesgo se está volviendo cada vez más global: nuevos hubs regionales de innovación están emergiendo. Oriente Medio se ha convertido en uno de los mercados de capital de riesgo de más rápido crecimiento: los países del Golfo Pérsico, que antes invertían principalmente en el extranjero, ahora están desarrollando activamente sus propios ecosistemas. En los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, se están lanzando parques tecnológicos y fondos para apoyar a las startups locales, lo que ya ha llevado a varias transacciones récord. Por ejemplo, en Dubái la startup Xpanceo recaudó $250 millones para desarrollar lentes de contacto "inteligentes", mientras que el proyecto fintech saudí Hala obtuvo $157 millones para la expansión de su plataforma de pagos, cifras sin precedentes para la región.
El mercado de capital de riesgo asiático también está mostrando mejoras fuera de China. En el Sudeste Asiático, Singapur ha tomado un papel destacado: el volumen de inversiones en startups de Singapur casi se ha triplicado en comparación con el año pasado gracias a varias rondas importantes (por ejemplo, $220 millones para el proveedor local de servicios eSIM Airalo). En India, el financiamiento de startups ha disminuido ligeramente en los últimos meses, pero sigue siendo significativo en cifras absolutas, mientras que en Corea del Sur y Japón se llevaron a cabo grandes rondas en el ámbito de semiconductores y robótica (el proyecto coreano Rebellions atrajo $250 millones para el desarrollo de chips de IA). Israel continúa manteniendo su posición como uno de los centros mundiales de innovación, a pesar de cierto descenso en los volúmenes de inversión en comparación con el pico de 2021.
Europa, aunque sigue por detrás de EE.UU. en términos de financiamiento, mantiene la estabilidad y gradualmente aumenta su impulso. El volumen total de inversiones en startups europeas en el último trimestre superó los $13 mil millones (en línea con el trimestre anterior y un 22% más que el año pasado), siendo aproximadamente el 60% de esta cantidad destinado a rondas de etapas iniciales. La escena de startups en el continente se está diversificando: además de Londres y Berlín, se están llevando a cabo grandes transacciones en París, Estocolmo, Tel Aviv y otros centros tecnológicos. Cabe destacar que cuatro de las nueve transacciones globales de M&A de más de $1 mil millones en el último trimestre correspondieron a empresas europeas, un testimonio de la madurez de varios jugadores locales. Además, América Latina ha contribuido al crecimiento global: en Brasil, el volumen de inversiones de capital de riesgo aumentó casi un 50% durante el verano, devolviendo nuevamente al país a las primeras posiciones de la región. Así, el mapa global de capital de riesgo sigue expandiéndose: el capital se está moviendo cada vez más hacia diversas partes del planeta en busca de equipos talentosos e ideas prometedoras.
Rusia y la CEI: iniciativas locales en un contexto de tendencias globales
A pesar de las restricciones externas, en Rusia y los países vecinos se está observando un resurgimiento de la actividad en startups. Inversores y corporaciones regionales están lanzando nuevos fondos y programas, buscando desarrollar ecosistemas de startups locales al hilo de las tendencias globales. En el último año, el mercado de capital de riesgo en Rusia ha comenzado a salir del estado de estancamiento: según datos del clúster de innovación de Moscú, el volumen de inversiones de capital riesgo en Rusia en la primera mitad de 2025 aumentó casi un 91% en comparación con el mismo período de 2024 (hasta $87 millones). Aunque las cifras absolutas siguen siendo modestas, la dinámica positiva es evidente: el número de inversores activos ha crecido más de un 20%, y cada vez más proyectos están recibiendo financiamiento.
En un contexto de retirada de muchos fondos extranjeros, los jugadores locales están ocupando el nicho dejado vacío. Los fondos de capital de riesgo privados y estatales ahora representan la mayor parte de las inversiones en startups, mientras que el papel de los business angels ha disminuido debido a los altos riesgos y el alto costo del capital. Una tendencia clave es la concentración de recursos en empresas más maduras y resilientes. Por ejemplo, el fondo de capital de riesgo estatal de Moscú, junto con varios fondos privados y corporaciones, concretó 5 transacciones por un monto total de aproximadamente 500 millones de rublos, invirtiendo en startups con modelos de negocio ya comprobados durante el reciente Moscow Startup Summit. Las grandes empresas tecnológicas también están participando: Yandex lanzó un programa de apoyo a pequeñas empresas por valor de 500 millones de rublos (créditos publicitarios y servicios de bajo costo para empresas emergentes), y el ecosistema de Sberbank sigue operando un acelerador corporativo para proyectos fintech.
Además de Rusia, el movimiento de capital de riesgo también se está desarrollando en otros países de la antigua CEI. En Kazajistán y Uzbekistán han surgido nuevos fondos y aceleradores de startups en el último año, y se está planificando un foro de capital de riesgo en Asia Central para 2026 con el fin de atraer inversores internacionales. Así, la región está tratando de integrarse en el mercado global de capital de riesgo, apostando por sus propias fortalezas, desde desarrollos en IA hasta el fintech y agrotecnología, tradicionalmente fuertes en la región. Aunque los factores externos imponen restricciones, las iniciativas locales inspiran un optimismo cauteloso y ofrecen esperanza para un crecimiento continuo de los ecosistemas de startups en el espacio postsoviético.
Optimismo cauteloso y crecimiento cualitativo
Al comienzo de noviembre de 2025, el mercado de capital de riesgo muestra una moderada confianza. Las OPI exitosas y las grandes rondas de inversión indican que el peor período de declive ha quedado atrás y que el ecosistema está entrando en una nueva fase de desarrollo. Al mismo tiempo, el actual auge se caracteriza por un enfoque más equilibrado en comparación con la eufórica burbuja de años anteriores: los inversores están evaluando con más cuidado, los fondos se están concentrando en las empresas más prometedoras, y se espera de las startups un modelo de negocio más sólido y un plan claro para alcanzar la rentabilidad.
El capital de riesgo ahora crece más en profundidad que en amplitud: se trata de un crecimiento cualitativo. El mercado ha aprendido las lecciones de las "burbujas" y sobrecalentamientos pasados: la valoración de muchas empresas ha sido revisada a niveles más realistas, haciéndolas más atractivas para inversiones a largo plazo. La consolidación de los jugadores revela un deseo de eficiencia y sostenibilidad, y la expansión del enfoque sectorial indica que existen oportunidades innovadoras en una variedad de áreas. A menos que ocurran nuevos choques externos, los expertos esperan que la tendencia de crecimiento moderado se mantenga: en 2026, las inversiones de capital de riesgo podrían continuar aumentando, pero sin excesiva euforia, centradas en la calidad de los proyectos. Así, el mercado de startups y capital de riesgo entra en el nuevo año con un optimismo cauteloso, equilibrando las altas expectativas de las tecnologías (especialmente IA) con un enfoque más sobrio y racional hacia la inversión.