
Noticias del sector energético para el sábado, 6 de septiembre de 2025: petróleo Brent alrededor de $70, sanciones al sector energético, reservas de gas en la UE, mercado de productos petroleros en Rusia y récords de energías renovables.
Los eventos recientes en el sector energético del 6 de septiembre de 2025 atraen la atención de inversores y participantes del mercado debido a la combinación de factores contradictorios. Por un lado, el mercado mundial del petróleo ha recuperado un frágil equilibrio cerca de los $70 por barril: el exceso de oferta y la desaceleración de la demanda continúan limitando el crecimiento de los precios. Por otro lado, la tensión geopolítica se intensifica nuevamente: los países occidentales están endureciendo las sanciones contra el sector energético ruso, y el prolongado conflicto en Ucrania sigue generando riesgos para la estabilidad de los suministros.
Mientras tanto, Europa se prepara con seguridad para el invierno, llenando sus depósitos de gas a un ritmo récord y manteniendo los precios del gas dentro de límites moderados. Paralelamente, la transición energética global se acelera: las energías renovables rompen nuevos récords de producción, aunque la confiabilidad de los sistemas energéticos todavía requiere apoyo de fuentes tradicionales. En Rusia, después de un aumento sin precedentes en los precios de los combustibles en agosto, las restricciones impuestas por las autoridades (incluida la prolongación de la prohibición de exportar combustibles) están estabilizando gradualmente la situación en el mercado interno.
A continuación, se presenta un resumen detallado de las noticias y tendencias clave en los sectores de petróleo, gas, electricidad y materias primas en la fecha actual.
Mercado del petróleo: Brent alrededor de $70, frágil equilibrio entre exceso y riesgos
Los precios del petróleo en el mercado mundial han mostrado una relativa estabilidad al inicio de septiembre. La mezcla de referencia Brent se ha consolidado en un rango de ~$68–70 por barril, mientras que el estadounidense WTI se negocia entre $64 y $66. Las cotizaciones actuales son aproximadamente un 10% más bajas que los niveles del año anterior, reflejando la normalización gradual del mercado tras los picos de la crisis energética de 2022-2023. Varios factores influyen en la dinámica de precios:
- Aumento de la producción de la OPEP+: En agosto de 2025, la alianza OPEP+ aumentó nuevamente su cuota de producción conjunta en aproximadamente 0,5 millones de barriles por día, continuando la recuperación gradual de la oferta de meses anteriores. Al inicio del otoño, el nivel total de producción de los participantes del acuerdo se acerca a los niveles previos a la crisis. En la próxima reunión de la alianza (programada para el 7 de septiembre), los países podrían tomarse un respiro en el aumento de la producción, teniendo en cuenta los signos de un exceso de oferta creciente y el aumento de las reservas mundiales de petróleo.
- Producción récord en EE. UU.: Estados Unidos ha alcanzado un máximo histórico en la producción de petróleo. Según la Administración de Información Energética (EIA), en verano el volumen superó los 13,5 millones de barriles por día, añadiendo volúmenes significativos al mercado global. Además, otros productores (como Brasil y Guyana) han incrementado sus exportaciones en los últimos años, aumentando la competencia por la cuota de mercado.
- Crecimiento débil de la demanda: El consumo global de petróleo está aumentando mucho más lentamente que en años anteriores. La Agencia Internacional de Energía (AIE) pronostica un incremento de la demanda mundial en 2025 de solo alrededor de +0,7 millones de b/d (en comparación, en 2023 fue de más de +2,5 millones de b/d). Incluso la estimación de la OPEP se ha revisado a ~+1,2 millones de b/d para 2025. Las razones son la desaceleración de la economía global y las consecuencias de los altos precios del período anterior, que incentivaron el ahorro de energía, así como el debilitamiento de la actividad industrial en China.
- Incertidumbre geopolítica: El conflicto prolongado y el enfrentamiento sancionador crean nerviosismo adicional en el mercado. La falta de progreso en las negociaciones significa que se mantienen las sanciones y la posibilidad de nuevas restricciones (anteriormente, Washington amenazó con aranceles del 100% sobre el petróleo ruso en caso de que fracasen los esfuerzos de paz). Simultáneamente, las propias sanciones y los riesgos militares (incluidos los recientes ataques con drones a la infraestructura petrolera) mantienen en los precios un “premio por riesgo”, impidiendo caídas significativas en las cotizaciones. En consecuencia, la geopolítica obstaculiza tanto el colapso de precios como su aumento brusco, manteniendo el mercado en un rango relativamente estrecho.
Así, el mercado petrolero se mantiene cerca del equilibrio: el exceso de oferta se compensa con los riesgos geopolíticos. Sin embargo, se espera un aumento de los excesos hacia finales de año, lo que podría aumentar la presión sobre los precios.
Mercado del gas: los depósitos de la UE llenos, precios moderados
En el mercado del gas, la atención se centra en Europa, donde los países de la UE han creado anticipadamente un impresionante suministro de combustible antes del invierno. A principios de septiembre, los depósitos subterráneos de gas (PSG) están llenos en más del 90% de su capacidad total, superando significativamente los cronogramas planificados y excediendo el objetivo establecido solo para noviembre. La activa importación de gas natural licuado (GNL) durante los meses de verano ha permitido acumular rápidamente reservas récord. Como resultado, los precios en bolsa del gas se mantienen en niveles relativamente bajos: los futuros en el hub TTF se negocian alrededor de 30 €/MWh (aproximadamente $400 por mil metros cúbicos), que es varias veces inferior a los picos observados durante la crisis de 2022. Esta situación de precios reduce significativamente la carga sobre la industria y la energía europeas antes de la temporada de calefacción.
La principal incertidumbre por delante es un posible aumento de la demanda de GNL en Asia durante el invierno, que podría desviar parte de los suministros y empujar los precios al alza. Por ahora, la situación es favorable para la UE: las reservas récord y los suministros estables permiten entrar con relativa confianza en el periodo invernal. Los reguladores europeos han declarado su intención de seguir manteniendo altos niveles de gas para garantizar la seguridad energética.
Geopolítica y sanciones: escalada de presión sobre el sector energético
Estados Unidos, en medio del prolongado conflicto, aumenta la presión sobre los socios de Moscú. Tras el fracaso del diálogo de paz, Washington impuso aranceles punitivos a India por sus compras de petróleo ruso (medidas similares amenazan también a China). Mientras tanto, la Unión Europea ha ampliado las limitaciones de sanciones, enfocándose en las empresas de transporte y comerciantes que ayudan a eludir el embargo vigente. Al mismo tiempo, ha aumentado la frecuencia de ataques de drones a instalaciones del sector energético ruso: varios incidentes recientes han interrumpido temporalmente algunas capacidades de refinación, aumentando la tensión en el mercado. Aunque los suministros globales hasta ahora compensan las pérdidas locales, una escalada adicional de riesgos militares podría desestabilizar gravemente los precios de las materias primas. Por lo tanto, la geopolítica sigue siendo un factor clave de incertidumbre para el mercado energético mundial.
Asia: India y China entre importaciones rentables y aumento de la producción
- India: Frente a la presión de sanciones, Nueva Delhi declara abiertamente que no puede renunciar abruptamente a las importaciones críticas de recursos energéticos rusos. Para mantener el mercado indio, los proveedores rusos ofrecen descuentos significativos (el petróleo Urales se vende a varios dólares menos que el Brent). Como resultado, India sigue comprando grandes volúmenes de petróleo y productos petroleros de la RF. Paralelamente, el 15 de agosto, el primer ministro Narendra Modi lanzó un programa para explorar yacimientos en aguas profundas: la empresa estatal ONGC ya está perforando en el mar de Andamán, con la esperanza de aumentar la producción propia de petróleo y gas a largo plazo.
- China: La mayor economía de Asia está aumentando simultáneamente sus importaciones de recursos energéticos y aumentando su producción interna. Pekín no se ha unido a las sanciones occidentales, manteniéndose como uno de los principales compradores de petróleo y gas rusos en condiciones favorables. La producción propia en China también está creciendo (+1% de petróleo y +6% de gas desde principios de 2025), pero esto no es suficiente para satisfacer las necesidades de su economía: más del 70% del petróleo que consume y alrededor del 40% del gas todavía tiene que importarse. Buscando fortalecer la seguridad energética a largo plazo, Moscú y Pekín han alcanzado un acuerdo reciente para construir un nuevo gasoducto "Fuerza de Siberia-2" hacia China, que en el futuro aumentará significativamente las exportaciones de gas ruso al mercado chino.
Transición energética: récords de energías renovables y desafíos para el sistema energético
La transición global hacia la energía limpia sigue avanzando en 2025, alcanzando nuevas alturas. En la Unión Europea, al final de 2024, las plantas solares y eólicas generaron por primera vez más electricidad en conjunto que las de carbón y gas (tendencia que se ha mantenido en 2025). En Estados Unidos, la participación de fuentes renovables en la generación ha superado el 30%, mientras que China continúa introduciendo decenas de gigavatios de nuevas plantas solares y eólicas cada año, estableciendo continuamente récords en la generación "verde". Según estimaciones de la AIE, las inversiones globales en energía en 2025 superarán los $3 billones, de las cuales más de la mitad se destinarán a proyectos de energías renovables, modernización de redes eléctricas y sistemas de almacenamiento de energía.
Sin embargo, el rápido crecimiento de la participación de generación renovable variable plantea nuevos desafíos. En ausencia de sol o viento, aún se requieren capacidades de respaldo de las plantas eléctricas tradicionales para cubrir los picos de demanda. En diferentes países se está invirtiendo activamente en grandes sistemas de almacenamiento de energía (baterías industriales, estaciones de bombeo) y en "redes inteligentes" para mejorar la confiabilidad de los sistemas energéticos. Los expertos pronostican que para 2026-2027, la energía renovable podría convertirse en la principal fuente de generación de electricidad en el mundo, superando al carbón.
Carbón: demanda estable con precios estables
A pesar de los esfuerzos por la descarbonización, el sector del carbón en 2025 sigue siendo un segmento grande y estable de la energía mundial. El consumo de carbón sigue siendo alto, en primer lugar en Asia. China, el mayor productor y consumidor de carbón, extrae más de 4 mil millones de toneladas al año, y prácticamente todo este volumen se destina a su consumo energético interno. Durante los picos de carga en verano, incluso estos volúmenes no son suficientes, y China se ve obligada a importar cargamentos adicionales de carbón para mantener sus plantas eléctricas. En India, cerca del 70% de la electricidad aún se genera en plantas de energía de carbón, y el consumo de carbón crece junto con la economía. Varios otros países en desarrollo de Asia también están construyendo nuevas plantas de carbón para satisfacer la creciente demanda de electricidad.
Los principales exportadores de carbón (Indonesia, Australia, Rusia, entre otros) han aumentado significativamente su producción en los últimos años, lo que ha permitido reducir los precios tras los picos récord de 2021-2022. Actualmente, los precios del carbón se mantienen en niveles relativamente moderados, proporcionando combustible accesible para las empresas energéticas y beneficios estables para las empresas mineras. Aunque muchos estados han declarado planes para eliminar gradualmente la generación de carbón, en los próximos años este recurso seguirá siendo indispensable para un suministro eléctrico confiable para millones de personas, especialmente en la región asiática. Así, el mercado del carbón se encuentra en un equilibrio relativo: la demanda es constantemente alta y los precios son moderados.
Mercado ruso de productos petroleros: restricciones a la exportación estabilizan los precios de los combustibles
En el mercado interno de combustibles de Rusia, se han tomado medidas decisivas a finales del verano para normalizar los precios de los productos petroleros. En agosto, los precios mayoristas en bolsa del gasolina y el diésel alcanzaron niveles récord debido a la demanda abrumadora, interrupciones en la operación de algunas refinerías y un exportación muy rentable. Esto obligó a las autoridades a prorrogar y endurecer las medidas restrictivas. En particular, actualmente se están implementando los siguientes pasos:
- Prohibición de exportación: El gobierno ha prorrogado la prohibición de exportar gasolina automovilística y diésel hasta el 30 de septiembre. Esta medida está destinada a desviar volúmenes adicionales de productos petroleros al mercado interno para saturar la oferta.
- Control de suministros: Se ha intensificado la supervisión de la venta de combustibles en el país. Las refinerías (NRef) deben garantizar en primer lugar las necesidades domésticas, excluyendo las reventas especulativas en la bolsa. Se fomenta la celebración de contratos directos entre NRef y empresas comercializadoras. También sigue en funcionamiento el mecanismo de compensación, que reembolsa a las empresas una parte de las pérdidas y estimula el suministro en las estaciones de servicio.
Gracias a las medidas adoptadas, para finales de agosto el aumento de los precios mayoristas se detuvo, y los precios al por menor permanecen bajo control (desde principios de año han aumentado menos del 5%). Las autoridades declaran su disposición a prorrogar las restricciones y emplear recursos adicionales si es necesario para evitar la escasez de combustibles. La situación en el mercado de productos petroleros se estabiliza gradualmente, y no se prevén saltos bruscos en los precios durante el otoño.